Caso clínico: VICAIR VECTOR 02
2 de marzo de 2023
Diagnosticada con atrofia muscular espinal congénita a los 11 meses de edad, la Sra. C, que ahora tiene 60 años, ha vivido con esta difícil discapacidad desde hace bastante tiempo. A lo largo de toda su vida, su dependencia de los demás ha sido lo que más le molesta. Cuando era adolescente, no podía simplemente pasar una noche con amigos, dependía de sus padres para todos sus movimientos. Aparte de eso, sin embargo, nunca recibió ningún tratamiento ‘especial’ durante su crecimiento, fue a una escuela normal y participó lo mejor que pudo.
La Sra. C. pudo caminar hasta los 30 años, después de lo cual comenzó a usar una silla de ruedas manual. Después de cinco años se cambió a una silla de ruedas eléctrica, las transferencias de horas extraordinarias se hicieron más difíciles a medida que los músculos de las extremidades y el tronco empezaron a fallar. Ella ahora depende de los ascensores para todas sus transferencias. La llegada de una silla de ruedas eléctrica ajustable, una ETAC Balder en combinación con los apoyabrazos Focal cambió mucho a medida que recuperó su libertad para hacer las cosas de manera más independiente.
En su configuración inicial, la señora. C desarrolló una úlcera por presión de categoría II en el área de sus TI. Esto fue eventualmente remediado cuando recibió un cojín contorneado.
A pesar de haber contribuido mucho a la curación de la úlcera por presión, la Sra. C. no está contenta con su cojín contorneado. Sus mayores objeciones es que siente que se está deslizando constantemente de su silla. Su compañero y cuidador lo confirman, ya que él indica que necesita reposicionarla con frecuencia diariamente. Además del deslizamiento, también indica que en su cojín actual no se siente cómoda saliendo al exterior de forma independiente. Cada vez que tiene que subir o bajar, siente que su posición cambia, al no poder reposicionarse, esto crea incertidumbre y temor. Durante el posicionamiento, la limitación de cadera de la Sra. C también debe tenerse en cuenta, el respaldo y el asiento de su silla de ruedas se colocan en un ángulo mayor de 90 grados para facilitar esto.
Para evaluar su situación, se realizaron dos mediciones: una medición iShear y un mapeo de presión. El mapa de presión muestra las cualidades ideales de redistribución de la presión del cojín contorneado. A través de la medición iShear podemos ver que las fuerzas totales de corte desempeñan un papel y que la fuerza de corte se distribuye casi por igual.
Para evitar que se deslice, la Sra. C. intentó usar un cinturón de posicionamiento. Para su decepción, esto no ayudó, la sensación de deslizamiento y el deslizamiento real no se evitaron. Además de esto, el cinturón tenía que colocarse extremadamente apretado y causar molestias.
Antes de comenzar la prueba con Vicair, la Sra. C. tuvo una última reunión con un consultor de su cojín contorneado para optimizar su posición. Esta experta optimizó su posición en el evento a la que asistió la Sra. C. haciendo algunos ajustes, sin embargo, resultó que, a diario, esta posición óptima no podía mantenerse. Parcialmente porque ni su cuidador ni la atención domiciliaria sabían cómo mantener la configuración diariamente.
no fue ideal, por lo que durante la prueba el cojín se ajustó en la posición óptima. La siguiente figura muestra los ajustes que se realizaron en el grado de llenado del Ajustador para que la Sra. C se considerara que estaba posicionada correctamente.
Cuando la Sra. C. entró por primera vez en contacto con Vicair en Supportbeurs 2018 (exposición de rehabilitación) en Utrecht, se sugirieron dos almohadillas como posible solución: el Vector O2 y el Ajustador O2. El Ajustador O2 resultó ser la solución óptima, debido a sus cualidades superiores de inmersión y redistribución de la presión. Además, el Ajustador O2 es extremadamente bueno en situaciones donde es necesario seguir las líneas del cuerpo y la barra preisquial minimizaría cualquier deslizamiento. Por lo tanto, el ensayo clínico se inició con el Vicair Ajustador O2, de 10 cm de altura. La configuración inicial del cojín no fue ideal, por lo que durante la prueba el cojín se ajustó en la posición óptima. La siguiente figura muestra los ajustes que se realizaron en el grado de llenado del Ajustador para que la Sra. C se considerara que estaba posicionada correctamente.
Nuevamente se realizó una medición del mapa de presión y una medición iShear. Cuando comparamos el mapa de presión con la situación anterior, podemos ver que las cualidades de redistribución de la presión de ambos amortiguadores pueden considerarse igualmente buenas. Cabe destacar, sin embargo, que casi no vemos rastros de los pies en el mapeo de presión del cojín contorneado. El mapa de presión Vicair Adjuster O2 muestra en gris claro un contorno de las piernas, lo que indica un mayor apoyo de las piernas.
Mapa de presión Vicair Ajuster O2
Después de una prueba de varias semanas, los resultados son muy positivos: la Sra. C está encantada con su Ajuster O2. Ya no experimenta la sensación de deslizarse hacia adelante e indica una gran cantidad de estabilidad. El primero lo confirma su compañero, ya que él ya no necesita reposicionarla, la posición correcta en la que se encuentra en la mañana dura todo el día. La Sra. C nos muestra que la estabilidad adquirida en su nuevo cojín le permite tener más funciones en la parte superior de su cuerpo: demuestra un movimiento de inclinación hacia delante que antes no podía hacer independientemente. No ha habido registro de llagas por presión, lo que demuestra las cualidades AD del cojín. También nos muestra que ahora ha cambiado la posición de sus pies, las fotos antiguas muestran sus pies completamente en el borde o la mitad fuera del soporte de sus pies. Ella comparte que tomó esta posición para prepararse, tratando de trabajar contra el deslizamiento. Ahora sus pies están normalmente posicionados sobre el soporte.
Resumiendo, su historia, nos cuenta que ha recuperado su confianza para moverse fuera. El aumento de la estabilidad le ha devuelto la confianza en sí misma para moverse, subir y bajar sobre las repisas sin temer las consecuencias.
